UN BUENO PARA ¿NADA?
Desde pequeño escucho la frase, se la repitieron tantas veces como su propio nombre. Todos los subestimaron y por un tan solo instante lograron que llegara a creer que él simplemente era eso: UN BUENO PARA NADA. Era uno más de la enorme lista de los marginados, de los nominados al anonimato y fracasados por toda la vida. Sin nadie que velara por su educación o alguien que estuviera interesado en su progreso se abalanzo en contra de lo que todos le predijeron. Aprendió a temprana edad que si deseas algo debes luchar por ello. Se mesclo con algunas personas y aprendió un oficio con el cual pudo pagar sus estudios. Siempre fue sobresaliente en clases. Se caracterizó por aprovechar las oportunidades, nunca tuvo temor a equivocarse, supero lo que todos dijeron de él y jamás permitió que alguien le marcara su ruta de conquista. ¿Qué es lo que ahora te limita a ti a salir adelante? Quizás me respondas que nadie algún día te brindo una mano de apoyo, que nadie confió en ti y...